Mucha gente piensa que el vino sin alcohol es mosto, solo zumo de uva, y esto no es la realidad. En este artículo te explicaremos por qué el vino sin alcohol no es zumo y los diferentes métodos para elaborar vinos sin alcohol. Sin duda el vino sin alcohol es una de las indústrias que más está creciendo, en nuestra tienda de bebidas sin alcohol encontrarás la mejor gama del mercado, para todos los gustos.
¿Qué es el vino sin alcohol?
Según la RAE, el vino «es el alimento natural obtenido exclusivamente por fermentación alcohólica, total o parcial, de uva fresca, estrujada o no, o de mosto de uva». El vino sin alcohol entra dentro de esta definición ya que se elabora de forma convencional – fermentando el mosto – y luego se elimina el alcohol mediante el proceso de desalcoholización. Por tanto el vino sin alcohol no es mosto, sinó que es un vino elaborado hasta el final que luego pasa finalmente pasa por un proceso de desalcoholización.
Como con las cervezas, hay vinos sin alcohol que pueden contener trazas de alcohol, siempre menos de 1% de contenido alcohólico. Si quieres comprar vinos sin alcohol, recomendamos revisar la etiqueta de cada vino desalcoholizado para saber el contenido exacto. En España, una bebida de menos de 1% de alcohol es considerada sin alcohol.
Si no sabes que vino sin alcohol escoger, te recomendamos nuestra lista de mejores vinos sin alcohol.
¿Cómo se hace el vino sin alcohol?
Muchas personas nos preguntan «¿cómo se hace el vino sin alcohol?«. Es un proceso complejo y la tecnologia mejora año tras año. Ahora mismo se puede crear cualquier tipo de vino sin alcohol: blancos, rosados, tintos, espumosos. Estas son las técnicas para elaborar vino sin alcohol:
Método de Conos Giratorios Invertidos
La tecnología CCR o sistema de conos giratorios invertidos es el único capaz de reducir el contenido de alcohol en el vino con cero pérdida de aroma y sabor. Se trata de una columna vertical de acero inoxidable con un eje central giratorio que contiene 40 conos invertidos que ayudan a eliminar suavemente los componentes volátiles del vino mediante una destilación al vacío. En resumen, se centrifuga el vino para separarlo en capas de líquido.
Durante el proceso, se pasa el vino por la columna y los aromas se eliminan en la primera pasada por el cono rotatorio y se guardan por separado para ser añadidos nuevamente más adelante. El alcohol se elimina en la segunda pasada. Los compuestos concentrados de sabor y aroma se vuelven a incorporar en su totalidad en el vino desalcoholizado, obteniendo un producto de calidad, con todo el sabor y aroma pero sin alcohol.
Ósmosis inversa
La técnica de ósmosis inversa consiste en pasar el vino por una membrana que permite separar el alcohol del vino. Esta membrana permite pasar el agua y el alcohol, pero no el resto de componenetes. Una vez separado el alcohol, se vuelven a recomensar el resto de componentes para crear el vino sin alcohol final.
Una ventaja de este método es que se evita el calentamiento del vino.
Liofilización
El método de liofilización consiste en congelar vino y después introducirlo en una cámara de presión al vacío. Entonces, parte del agua y del alcohol se eliminan mediente el proceso de sublimación (paso directo del estado sólido a gaseoso). Una vez separado el alcohol, se vuelven a juntar el resto de componentes para crear el vino sin alcohol.
El inconveniente de esta técnica es que se producte menor intensidad de aroma en el vino desalcoholizado.
Como decíamos, la tecnología va avanzando y seguro que aparecen nuevas y mejores técnicas para conseguir un vino desalcoholizado de calidad.
